
Quien crea que el título de escritor nacional friki de Ciencia Ficción está barato, que basta acudir a las presentaciones bien en forma de avatar, bien disfrazado de capitán Kirk o emperador Ming (en el caso de space opera) o de acelerador de partículas (sector Hard), es que no conoce al padre José Antonio Fortea.
Me cae bien el padre Fortea. Ser un joven cura que escribe Ciencia Ficción, que mantiene uno de los blogs más seguidos, que no se arredra por mantener posturas que a muchos puedan parecer radicales (el hombre es, amén de párroco de los de sotana, exorcista de la diócesis de Madrid), son muchos puntos a favor. Por otro lado, Fortea no basa su ideología sólo en el canon católico, trata de dialogar con la ciencia y la cultura contemporánea desde un más que aceptable conocimiento técnico (a mi parecer). Quien piense que Fortea es sólo un friki tronao, yerra. Vayas si yerra.
Así pues, cuando en un confidencial católico leí una reseña (por supuesto hagiográfica) de su novela Cyclus Apocalypticus, transposición a la ciencia-ficción del Apocalipsis de San Juan, me dije... nen, aquí hay tema. El Fin de los Tiempos es un clásico de
De las tres interpretaciones posibles del apocalipsis (preterista –profecías a toro pasado y relativas al siglo I DC- ; idealistas; o historicistas), el padre Fortea se planta en la tercera. Es decir, el Apocalipsis será. El 666 imperará y destruirá a la iglesia. Traerá plagas, hambre y guerra. Terminará con el mundo y sólo entonces bajará de los cielos Jesús y su angélico ejército a redimir al hombre para siempre más. 144.000 justos lo verán.
El trabajo de Fortea es novelar esos pasos. Y en su honor hay que decir que, como norma, realiza un impagable trabajo de fidelidad al documento de partida, el Apocalipsis, sin duda lo mejor.
Pero tropieza en lo literario. Por estereotipado, por cartón, por descuidado en la prosa... Todo lo cual hace que la verosimilitud se diluya cual sal en el río. Fortea utiliza elementos tan trillados en las películas de serie B... Pero tanto.... Las asimilaciones nazis-666, emperador malo-malísimo, actualización de
Añadan a eso reiteraciones estilísticas, personajes de quita y pon, situaciones mascadas y previsibles y el desastre es seguro.... una novela inmadurita a más no poder.
Pero que tiene momentos gloriosos. Sí señor. Explicar como una crisis económica puede acabar con el Estado del Bienestar acaso hoy no tenga mayor mérito, pero hace diez años, cuando Fortea escribió el libro (editado en 2007), tela... La evolución de la biomedicina en un mundo hipermaterialista, fantástico también... Los rasgos de esa sociedad pre-666, decadente por clientelista... clavados....
Tan es así, que no me resigno a no instar al padre Fortea a volver a empezar. El hombre tiene un novelón entre manos... ¿A qué espera? Tal vez debiera renunciar a la novela situacional y decantarse por un pseudo-ensayo historicista... Donde el dolor del martirio se reduzca a un narrador que, objetivamente, habla de los Últimos Días... No sé... Pero sabe mal que un proyecto narrativo tan flipante en su planteamiento resulte tan decepcionante. Él puede hacerlo mejor. Mucho mejor...
Luis Besa